Joseba VIVANCO
Fútbol internacional

Lo que hay que ver... en un campo

Fellaini deja huérfana la Premier a razón de 12 millones por año en China, pero siempre nos quedará el presidente del Notts County.

Un gato negro se coló en el césped donde esta jornada dirimían puntos Everton y Wolwerhampton, y obligó a detener el partido durante un par de minutos. Desde luego que en un terreno de juego se han visto cosas mucho más retorcidas, como aquel cochinillo lanzado a Luis Figo en un Barça-Madrid, o las ratas muertas que hace un par de años seguidores del Copenhague arrojaron a los jugadores del Brondby en el ‘clásico’ danés, por no mencionar las decenas de bebés de juguete de los hinchas de Rosario Central tras ganar el derbi a Newell´s, la lluvia de consoladores sobre el arquero ‘Mono’ Montoya por las ‘barras bravas’ de Boca, los cacahuetes con destino a Zlatan Ibrahimovic y que el sueco no dudó en comerse o la tradición que durante décadas reinó en Stamford Bridge de lanzar apio a los futbolistas rivales y que José Mourinho prohibió. En los últimos tiempos, por ejemplo, se ha convertido en tradición en el Stade du Pays de Charleroi que antes de cada encuentro la afición local llene el verde de ositos de peluche para los menores hospitalizados, bajo el lema «No nounours, no party» (Sin ositos, no hay fiesta). Lo que nadie podía imaginar es que, no el césped, sino en la grada, los aficionados del Lincoln City iban a presentarse en el feudo del colista de la cuarta división inglesa, el Notts County, con lujuriosos penes hinchables tamaño XXXL y todo para burlarse más que de su rival, de su presidente.

Alan Hardy es el dueño de este añejo club, el primero de carácter profesional de la historia, creado en 1862, y hace días subió a su cuenta de Twitter, huelga decir que por error, una foto de sus genitales, ante lo que rápidamente pidió disculpas. Conocido el ‘ríete de ti mismo’ del humor inglés, a la hinchada del equipo visitante no se le ocurrió otra cosa que presentarse con vistosos falos gigantes más propios de Magaluf que de un estadio de fútbol. Eso sí, nada que ver con el gesto de Marcelo Bielsa, que antes del crucial partido por el liderato en la segunda inglesa entre Leeds y Norwich, repartió golosinas entre los más pequeños seguidores que aguardaban la llegada de su equipo. Luego, el partido acabó 1-3 y ambos colideran la clasificación.

No comparten la cumbre en la Segunda división alemana, pero casi, el histórico Hamburgo y su vecino del barrio portuario de la ciudad el St.Pauli, primero y segundo, tres puntos de diferencia, seguidos de cerca por otro no menos histórico como el Colonia. El líder, los ‘dinosaurios’, quiere regresar a la Bundesliga y lo hace bajo la presidencia de Marcell Jansen, quien vistiera los colores del club hasta colgar las botas hace tres años, a los 29, y declarar que «no puedo besar otro escudo». Fue elegido hace poco presidente de la entidad, elección que no le impide seguir entrenando y jugando cuando puede con el equipo amateur.

El polaco Piatek, suma y sigue

El que sigue jugando y haciendo lo que mejor se le da, marcar goles, es el veterano Fabio Quagliarella, cumplidos 36 años, y a un gol de los 17 de Cristiano Ronaldo en Serie A. Nacido a pocos kilómetros de Nápoles, hace una década cumplió su sueño de vestir sus colores... y ahí comenzó su calvario: jugó poco, fue acusado falsamente de pedófilo, la afición la tomó con él, fue víctima de un extorsionador... hasta que se mudó a la Juve. Y cuando tiempo después todo apuntaba a la retirada en la Sampdoria, emergió ese ADN de los depredadores vitalicios del área: con 33 años anotó 13 dianas, 19 la temporada pasada y ya suma 16 en esta. Suma más goles que el ‘cafetero’ del Atalanta Duván Zapata y la revelación polaca Krzysztof Piatek.

Lo de este último, reciente fichaje para la delantera del Milan, ha sido llegar y besar el santo. Marcó en el empate ante la Roma y en tres partidos de rossonero ha hecho otros tantos goles. Piatek porta el ‘9’ a la espalda, un dígito que han vestido algunos de los más ilustres ‘killers’ que han militado en Italia. En la anterior jornada, el Milan homenajeó a todo un Andriy Shevchenko, uno de esos icónicos jugadores que han sudado el ‘9’ milanista, como ya lo hicieran nombres de la talla de Roberto Baggio, Patrick Kluivert o Marco van Basten. Ninguno de ellos se alzó nunca con la Bota de Oro al máximo goleador continental, una pugna que en la presente temporada es cosa de tres: Messi, Mbappé y Ronaldo, con 21, 18 y 17 tantos, respectivamente, seguidos del citado Quaglariella y Mohamed Salah.

Tres de Agüero, dos de Higuaín

El que está fuera de esta pugna es el argentino Kun Aguero, con 14 dianas gracias al triplete que marcó en el City-Arsenal (3-1), y que sirvió para que los de Pep Guardiola se pongan a dos del líder Liverpool –los Citizens se podían poner primeros anoche en partido adelantado– que viene de dos empates seguidos. El Tottenham de Pochettino, a pesar de la baja de Harry Kane, es tercero al acecho tras ganar sus tres últimos duelos con goles en los minutos 92, 87 y 83.

Intenta no descolgarse, cuarto, a 6 del tercero, el Chelsea de un Maurizzio Sarri que cuestionó el compromiso de sus jugadores, incluso de un Eden Hazard que cada vez apunta más al Madrid en verano, y estos respondieron con un 5-0, con doblete del fichado ‘Pipita’ Higuaín. El que pierde algo de fuelle es el cuestionado Arsenal, al que adelanta un United que antes de Navidad estaba a ocho puntos: los Red Devils no dejan de sumar de tres en tres desde la llegada al banquillo de Solksjaer y el único lastre que sueltan es el del belga Marouane Fellaini, 31 años, cinco temporadas en Old Trafford y que se ganará su ‘Visa oro’ en el fútbol chino, a razón de 12 millones de euros por año... y multipliquen por tres. Y otro destacado que hace las maletas a la misma liga asiática es el eslovaco Marek Hamsik, que se libera así de la ‘jaula’ que al final el Napoli resultó para él.

El que se fue para siempre, se nos fue para siempre, es Emiliano Sala, cuyos restos se buscan junto a los de la avioneta que le trasladaba a Cardiff para unirse a los bluebirds. La que iba a ser su nueva hinchada le homenajeó esta jornada, recuerdo que emocionó a su propio entrenador, Neil Warnock, que no pudo contener las lágrimas. Eso sí, la muerte de Sala supone que el Nantes había vendido al jugador y objetivamente ya no era suyo, con lo que club galés debería pagar por un jugador que no tiene. El otro detalle emotivo del partido fue el del bigoleador Bobby Reid, que intercaló el apellido de su madre en la camiseta para agradecerle «todo lo que ha hecho por mí». Y es que madre...

El que cambió la grafía de sus jugadores en las camisetas fue el Inter de Milán, como guiño al Año Nuevo chino. Gesto que no le sirvió de mucho, al punto de caer 0-1 ante el Bologna y ser despedido con pitada. La Juventus sigue líder, pero tras ceder un 3-3 en casa ante el Parma. Es uno de los nueve equipos imbatidos que quedan en Europa, tras la primera derrota del PSG, a manos del Lyon. Sin besar la lona siguen de momento el Red Bull Salzburgo austríaco, el PAOK griego, el Estrella Roja serbio, el Gzira United maltés o el Fiorita luxemburgués, entre otros. Ninguna de estas competiciones aparece como las que más gastaron en fichajes en 2018, según el reciente informe de la FIFA. ¿Saben el país que se aupó al séptimo puesto? Arabia Saudí, gastándose 173 millones de dólares. Y todo para que vaya Qatar y se lleve la Copa asiática con su goleador Ali Almoez, 22 años, de origen sudanés y que jugó en la Cultural Leonesa.