Joseba VIVANCO
Fútbol internacional

Si Borges levantara la cabeza

Los ultras del Legia polaco no quieren «maricones» en Varsovia y los del Abeerden escocés confunden «colchón» con «promiscua».

Un 4 de marzo del año 2000, hace 19 años, se alumbraba uno de los inventos que descolocó el reparto equitativo de las horas del día por parte de millones de personas, especialmente aquellas aficionadas a un deporte del que el escritor Jorge Luis Borges no entendía «por qué se hizo tan popular ese fútbol inglés», pues «es raro observar que siendo Inglaterra un país generalmente odiado –aunque yo quiero mucho a Inglaterra– nunca se haya usado ese argumento en su contra, como país generador de deportes puramente físicos. Es que la idea de que alguien pierda o alguien gane me parece esencialmente desagradable. Hay una idea de supremacía, de poder, que me parece horrible». Sí, por si el genial argentino no pensara que este mundo tenía bastante con un deporte «feo estéticamente», donde «once jugadores contra otros once corriendo detrás de una pelota no son especialmente hermosos», se inventó la Play Station 2. Y al erudito Borges no le fataba cierta razón, porque como se quejaba este fin de semana el alemán Jurgen Klopp, tras el empate sin goles en el Merseyside derby de Liverpool, la gente, especialmente la prensa, «se cree que esto es jugar a la Play Station». Y a eso solo juega Leonel Messi.

Los Reds no pudieron pasar de la igualada a cero ante el Everton –extienden a 19 los duelos sin perder ante los evertonians–, y ya lo decía otro ilustre escritor, Eduardo Galeano, que un partido 0-0 era como dos bostezos. No solo eso, el Liverpool perdió el liderato que tanto le estaba costando sostener las últimas fechas y el City, con lo justo, le saca un punto de ventaja. Las tres últimas jornadas fuera de casa el Liverpool ha empatado. No pierde partidos, pero se ha dejado seis puntos claves para la Premier. Ahora no depende de sí mismo y por primera vez desde el 8 de diciembre no ostenta la cabeza. A los Citizens les quedan cinco salidas y a los Reds cuatro, y a ambos les resta enfrentarse todavía a dos equipos situados entre los seis primeros de la tabla.

Tercero en discordia, el Tottenham, perdió ya toda opción al empatar en casa ante el Arsenal, en tanto el United, a la chita callando, se cuela entre ambos y ya es cuarto. Sexto es el Chelsea de Kepa, que volvió a salir y fue nombrado jugador del partido. «Podría matarle, pero tomé la decisión correcta», aclaró Maurizzio Sarri sobre el exleón.

Balotelli, gol y a Instagram

Al que de momento no sabemos si le ha caido alguna multa por parte de la Liga francesa es al irrepetible Mario Balotelli, el mismo que festejó un golazo esta jornada sacándose un selfie con sus compañeros y subiéndolo en ese instante a su Instagram. El Marsella ha aplaudido en sus redes la ocurrencia, en tanto en su exequipo, el Milan, otro cuyo molde se rompió al nacer como Gennaro Gattuso, vino a denunciar algo que no es nuevo en su boca, «yo perdía un partido e iba a las taquillas y golpeaba todo. Hoy, pierden, se sacan un selfie y lo suben a redes sociales. Me dan asco».

Los Rossoneri ganaron y aprovecharon la derrota del Inter para ponerse terceros, en una jornada en la Serie A marcada por el recuerdo al malogrado Davide Astori y en la que se dirimía el enésimo derby della Capitale, Lazio-Roma, facile 3-0 para los ‘laziale’, con presencia en la grada, junto a los Irriducibilli locales de miembros de la ‘Curva’ del Espanyol. Ninguno de ellos estaría a buen recaudo, seguro, en el estadio San Paolo de Napule –en dialecto local–, dada la irreconciliable enemistad entre tifosi napoletani y romanos. Aunque para angelitos, seguidores del Legia Varsovia, que después de que el alcalde de su ciudad hubiera firmado una histórica declaración en apoyo a la comunidad LGBT+, desplegaron en el estadio una enorme pancarta donde se podía leer ‘‘Varsovia libre de maricones’’.

Aficionados tan educados y tolerantes como los del Aberdeen escocés, que quisieron insultar a un futbolista rival, el colombiano Alfredo Morelos, del Rangers, por su dureza cada vez que se enfrentan, y es que ha sido expulsado en tres de las cuatro veces en que ambos equipos se han visto las caras. Pues ni cortos ni perezosos, exhibieron una pancarta donde se podía leer: ‘‘Morelos tu madre es un colchón’’. Lo cierto es que Morelos ni se dio por aludido, y su madre menos, porque el artista que ideó el lema debió de teclear la palabra matress en el traductor de Google, que en inglés suele utilizarse para referirse a alguien promiscuo sexualmente, pero que traducida al español es ‘colchón’. Si ya lo decía Borges, «el fútbol es popular porque la estupidez es popular».

Arranca la MLS con dos vascos

En fin, que volviendo al fútbol que se juega, y no en la Play Station, Napoli y Juventus se daban la última oportunidad esta jornada para poner un poco de suspense a la película del Calcio. Pero ni por asomo. Sentenció la Vecchia Signora 1-2, con penalti fallado en el último suspiro por los locales, y a principios de marzo el equipo de Turín le saca 16 puntos al segundo. Y aun así, su técnico Massimilano Allegri sigue tan cuestionado que su futuro tiene fecha de caducidad, como la de, parece, Mauro Icardi en el Inter, con cuya agente, es decir, su mujer Wanda, ha contactado la Juve para mosqueo del club interista. Por cierto, Antonio Conte aparece como futuro técnico nerazurro.

Si los líderes del Scudetto necesitan de un jugador franquicia ese bien pudiera ser David Villa, que ha dejado la liga estadounidense para fichar por la japonesa y esta jornada se estrenó con gol de la victoria para el Vissel Kobe de Juanma Lillo y junto a su amigo Andrés Iniesta, frente al Sagan Tosu de Fernando Torres. Duelo de campeones.

El ‘Guaje’ ha dejado atrás su exitoso paso por una Major League Soccer que este fin de semana estrenó su 24ª edición y se alargará hasta diciembre. En 1996 se fundó con 18 equipos, este año lo hace con 24, incluida la novedad del FC Cincinnati, y para 2022 se espera que sean 28. Competición que no deja de crecer en todos los sentidos y que desde hace años obliga a las nuevas franquicias que se incorporan a construir un estadio específico para el fútbol. De esta forma se ha ido poniendo fin a los alquileres de recintos de béisbol o fútbol americano hasta el punto de que 18 de los 24 clubes cuentan para esta temporada con un estadio de soccer.

Otra curiosidad de la MLS es que para evitar que la economía de las franquicias se ponga en riesgo, desde sus inicios existen topes salariales, en torno ahora a los 6 millones de dólares. Una regla que sortean solo los conocidos como ‘jugadores franquicia’, designados por cada club y a los que se les pueden pagar suculentas sumas de dinero, caso del primero en estrenarse, David Beckham en 2008, y al que se sumaron Thierry Henry, Keane, Lodeiro, Villa, Giovinco, Vela e Ibrahimovic, entre otros. Entre ellos no están los dos vascos que juegan en esta MLS, Jon Bakero, en el Toronto FC, y Jon Erice, en el Vancouver. Suerte a ambos.

Como esperan en el Rennes francés que tenga un largo recorrido un chaval llamado Eduardo Camavinga, franco-angoleño, que a sus 16 años y 4 meses anotó una tripleta este fin de semana con el filial de la tercera división. Apunten su nombre, ese y el de un joven de 19 años que está siendo la sorpresa en el nuevo líder de la liga portuguesa, el Benfica. Se llama Joao Félix, debutó en enero y forma parte de la prometedora generación del 99 de ‘Las Águilas’. Esta jornada vencieron en Do Dragao, 1-2, arrebataron el liderato al Porto y uno de los tantos lo marcó, adivinen, sí, él.

Quién sabe si alguno de ellos acabará en ese Borussia Dortmund ‘cazatalentos’ por el mundo, pero al que le está costando defender el liderato en la Bundesliga. Los dos primeros clasificados, borussers y un rescutitado Bayern, están empatados a puntos y solo la diferencia de goles decanta la balanza de lado aurinegro... Aurinegro no, sino morado, es el color que el Alianza de Lima viste cada octubre como tributo al Señor de los Milagros al que profesa, pero será este mes de marzo, para sumarse al Día Internacional de las Mujeres, cuando el Danubio uruguayo ha decidido denunciar la desigualdad de género y la violencia machista a través de los números a la espalda de sus camisetas, reflejando distintas cifras que delatan este grave problema. No en vano, el club de Montevideo cambió en 2017 por decisión de sus socios el nombre de su estadio para agregarle el de María Mincheff de Lazaroff, madre de los niños que fundaron el club en 1932. No todo está perdido, señor Borges.