Como estaba previsto, la segunda etapa del Giro, entre Bolonia y Fucecchio, de 205 kilómetros, se resolvió al sprint. Y el alemán Pascal Ackermann (Bora), en su primera gran vuelta, no desaprovechó la primera oportunidad para lograr la victoria de etapa, la cuarta personal esta temporada. Lo hizo, además, por delante de otros tres sprinters cualificados como el italiano Elia Viviani (Deceuninck Quick Step), el australiano Caleb Ewan (Lotto Soudal) y el colombiano Fernando Gaviria (UAE).

Tras la contrarreloj inicial de Bolonia el sábado, la segunda jornada estuvo protagonizada por una fuga que duró 192 kilómetros pero que terminó faltando 7,1 kilómetros para la línea de meta. La ventaja máxima de los escapados fue de 4:40, pero los equipos de los sprinters no quisieron dejar escapar la oportunidad y no les dieron ningún tipo de opción.

Para ello, el italiano Vincenzo Nibali, tercero en la general, se colocó al frente del grupo junto a sus compañeros del Bahrain para controlar el ritmo y conseguir una posición ventajosa de cara al final de la etapa.

No andaban lejos Mikel Landa (Movistar), que se dejó bastante tiempo en la crono del día anterior, y Simon Yates (Mitchelton), segundo en la general.

Poco a poco, la fuga perdió integrantes y solo se quedó con cuatro corredores, los italianos Giulio Ciccone (Trek-Segafredo), Marco Frapporti (Androni Giocattoli), el polaco Lukas Owsian (CCC) y Francois Birard (AG2R).

Los equipos querían sprint

Aguantaron hasta los últimos veinte kilómetros, pero el pelotón iba acercándose cada vez más. Tras un esfuerzo de más de cuatro horas, la ventaja se acabó definitivamente a 8 kilómetros del final. El Bora tomó el mando de un grupo muy compacto, en el que los demás equipos buscaban un espacio para poder preparar el ataque final. Giacomo Nizzolo se vio obligado a cambiar de bicicleta y después tuvo un problema mecánico en su bicicleta de repuesto, por lo que sus posibilidades de participar en el sprint fueron nulas.

Este se lanzó a 300 metros del final y Ackermann atacó primero, perseguido por Gaviria y Viviani. El alemán empujó fuerte y Viviani, que se pegó a la rueda del colombiano, no tuvo opción de alcanzarle. Gaviria no tuvo energías para aguantar el empuje de Ackermann y fue superado a pocos metros de la línea de meta por el italiano y Ewan, que completó el podio de la segunda etapa del Giro 2019.

Primoz Roglic (Jumbo) mantuvo la maglia rosa y su ventaja sin variaciones sobre Yates (19 segundos), Nibali (23) y sobre Miguel Ángel López y el holandés Tom Dumoulin, ambos a 28 de la primera posición en la clasificación general. La tercera etapa se disputa entre Vinci, ciudad donde nació el polímata Leonardo Da Vinci en 1452 y del que se cumple este año el 500 aniversario de su muerte, y Orbetello, de 220 kilómetros.

Caídas de dos escuderos de Mikel Landa

La segunda etapa del Giro, la primera con el pelotón unido tras la contrarreloj del sábado, tuvo sus primeras consecuencias en cuanto a caídas. Héctor Carretero y Jasha Sutterlin, ambos del Movistar Team, se vieron inmersos en una caída en la parte delantera del pelotón a falta de 27 kms. El albaceteño se levantó con rapidez, pero el alemán, que incluso se retiró el casco, permaneció sentado y con aparentes molestias, sobre todo en las manos. Carretero cruzó la línea de meta a 9:14 de Ackermann, mientras Sutterlin, uno de los hombres importantes del equipo de cara a las aspiraciones de Landa en la general, llegó finalmente a 11:51 del vencedor.

Entre los corredores vascos, el propio Landa entró en el grupo principal, en el puesto 28º, mientras que Víctor de la Parte (CCC) fue 54º, Ion Izagirre (Astana) 62º, Pello Bilbao (Astana) 71º y Mikel Nieve (Mitchelton) 101º, estos cuatro a 5 segundos, y Markel Irizar (Trek Segafredo) fue 160º, a 12:10 del vencedor.I.C.