Es la gran sorpresa comercial de la temporada, ya que estamos ante una producción independiente que está alcanzando en la taquilla cifras en teoría sólo al alcance de las grandes inversiones de Hollywood. Habiendo costado apenas siete millones de dólares lleva ya recaudados en todo el mundo noventa. El artífice de la jugada es el debutante Justin Baldoni, que ha dirigido y producido este melodrama romántico que está cautivando a las audiencias adolescentes, más o menos las mismas que se emocionaron con “Bajo la misma estrella” (2014). Si esa película consagró a la joven actriz Shailene Woodley, ocurre ahora otro tanto con “A dos metros de ti” (2019) y su estelar Haley Lu Richardson.

Ella encarna a Stella, una paciente ejemplar que no desespera y cumple las órdenes del personal médico a rajatabla, hasta que su mundo ordenado se viene abajo cuando conoce en el hospital a Will, interpretado por Cole Sprouse, y que es justo lo contrario. El chico rebelde le contagia de su melancolía y de su tristeza, a la vez que la chica lucha por transmitirle esperanza y ganas de vivir.

Ambos padecen una fibrosis quística, la grave enfermedad o trastorno respiratorio genético de pronóstico terminal. La pareja de la FQ ha de apostar por el amor platónico, debido a que no se pueden tocar ni acercarse el uno al otro a menos de dos metros de prudencial distancia, siempre y cuando quieran evitar el contagio o contaminación cruzada. Un punto de partida original para quienes gusten de las situaciones sentimentales.