Reflexión LVI del blog Psicobasket del periodista vizcaino Gonzalo Vázquez. «Cada vez que un jugador acude al tiro libre el Baloncesto se convierte, de repente, en un juego de mesa. Pero ojo, solo para el apostante». Con 99-101 en contra, el base de los Bulls Kirk Hinrich optaba a forzar la segunda prórroga frente a los Wizards. Para su desgracia, erró el primer tiro libre, y el rebote del segundo lanzamiento, que fallaba deliberadamente,, iba a caer en las manos de los jugadores de Washington, que se adelanta 0-2 en su serie.

En los restantes dos partidos, Toronto e Indiana conseguían poner la igualada ante Brooklyn y Atlanta, respectivamente. DeMar DeRozan, que en el primer partido ante los Nets decepcionó con un 3 de 13 en tiros, se fue a los 30 puntos para dar el triunfo por 100-95 a la franquicia canadiense, mientras que Luis Scola, con 20 tantos, fue el mejor sostén que tuvieron los 27 tantos de Paul George en el triunfo por 101-85 de los Pacers ante unos Hawks que encajaron un parcial brutal de 53-33 en la segunda mitad.

CHICAGO BULLS (0) -WASHINGTON WIZARDS (2) (99-101). Ni el más acérrimo de los seguidores de los Wizards habría imaginado que la franquicia capitalina se marcharía de Chicago con un 0-2 a su favor. Después de un encuentro que acabaría con empate a 91, Washington le sacó partido a los nervios y a las imprecisiones de los Bulls en el tiempo extra, con Nene Hilario anotando seis puntos consecutivos para adelantar a su equipo 91-97, y Kirk Hinrich, que está viviendo su segunda juventud, errando un tiro libre clave a dos segundos.

El partido arrancaba con tono festivo para los Bulls, ya que Noah recibía de manos de Dikembe Mutombo el premio al Defensor del Año. Pero las cosas cambiarían desde el salto inicial. El alero Bradley Beal, máximo anotador de Washington con 26 puntos, encabezaba un parcial inicial de 20-31. De hecho, hasta que Dunleavy no adelantara a los Bulls por 65-64 en el tercer cuarto, Chicago siempre fue a remolque, y aún podía dar gracias a los buenos minutos de Taj Gibson, que aportaba 22 puntos y 10 rebotes saliendo del banquillo, para mantener a los Bulls dentro del partido.

Con todo, una vez haber logrado la remontada, los Bulls desperdiciaron la opción de amarrar el empate a uno al tener hasta diez puntos de ventaja. Bradley Beal, con la colaboración de Trevor Ariza e Hilario, conseguía empatar a 91 y amarrar este resultado.

En la prórroga, Washington se escaparía con seis puntos seguidos de Nene. Chicago remontaría pero Hinrich, con 99-101 a dos segundos del final, primero erraba un posible «dos más uno» en penetración, y los nervios lo acabarían por traicionar en la línea de tiros libres.

TORONTO RAPTORS (1) -BROOKLYN NETS (1) (100-95). La veteranía de los Nets trae de cabeza a los jóvenes Raptors. Desde el 1-8 de arranque, la franquicia neoyorquina mantenía un ritmo constante, capaz de parar los arreones locales y de tomarle la delantera cuando su rival se frenaba. Joe Johnson, con 18 puntos, fue el máximo anotador de Brooklyn, con la buena ayuda de Deron Williams, Kevin Garnett y el exbaskonista Mirza Teletovic.

La diferencia respecto al primer partido fue DeRozan. Valanciunas, con 15 puntos y 14 rebotes, mantuvo su firmeza interior y hasta cuatro compañeros más sumaban un mínimo de 11 puntos. Faltaba que DeRozan, agobiado en el primer partido, se soltara. Explotó en el último cuarto y consiguió que Kyle Lowry se sumara a su lucha. Ese arranque de talento marcó la diferencia y puso el empate en la serie.

INDIANA PACERS (1)-ATLANTA HAWKS (1) (101-85). Después del inesperado triunfo de Atlanta, hubo quien vio rondar fantasmas en el segundo envite, al ver que la franquicia de Georgia campeaba por 48-52 al descanso. Millsap -máximo anotador de Atlanta con 19 puntos- hacía la vida imposible a los Pacers, que no conseguían parar el juego de los Hawks.

No obstante, tras el receso encontraron la fórmula. La retaguardia de los Pacers apretó las clavijas, se hizo con los rebotes -38 a 31- y dejó a Jeff Teague -héroe del primer partido con 28 tantos- en la mitad de su producción -14-. En ataque, Paul George rozó el triple-doble -27 puntos, 10 rebotes y 6 asistencias-, aunque a diferencia del primer partido, hubo quien le echara una mano. El exbaskonista Luis Scola, por ejemplo, aportó 20 puntos y 7 rechaces, mientras que CJ Watson y George Hill también llegaban a los dobles dígitos. Aire puro para los Indiana Pacers.