Los nombres de Nico Serrano y Nico Williams estaban marcados en rojo desde hace tiempo entre los seguidores del Athletic. Los Nicos llevan despuntando en categorías inferiores desde que llegaron a Lezama.

Williams recaló en el club bilbaino de la mano de su hermano y tras jugar una temporada en el alevín de Osasuna. Serrano también estuvo en Tajonar durante tres campañas, pero fue fichado por el Villarreal a los 12 años. Antes de cumplir los 16, el Athletic apostó fuerte y abonó 300.000 euros para traerlo a Lezama. Al igual que otros jugadores del primer equipo rojiblanco como Iñaki Williams, Sancet o Yeray el representante de ambos es Félix Tainta.

Hace dos temporadas se salieron en el juvenil de Dvisión de Honor del Athletic que finalizó el campeonato en primera posición antes del parón por la pandemia. Serrano firmó 14 goles en 19 partidos y el menor de los Williams 6 goles.

Marcaban tantas diferencias que la dirección deportiva optó porque participaran en las fase de ascenso del Basconia y del Bilbao Athletic. Nico Williams acompañó al tercer equipo que dirigía Patxi Salinas y con el que ya había debutado esa misma campaña, mientras Joseba Etxeberria incorporó a Serrano a la eliminatoria que disputó el filial.

Ninguno de los equipos prosperó en su intento para subir de categoría, pero ambos futbolistas fueron ascendidos al segundo equipo al año siguiente. Incluso, Serrano participó ese mismo verano en parte de la pretemporada con el primer equipo que dirigía Garitano.

Nico Williams se acopló rápidamente a la exigencia de la nueva categoría en Segunda B y se erigió en una pieza fundamental en el ataque del Bilbao Athletic. Al desparpajo y atrevimiento que demostraba en cada partido se le unió el acierto ante la portería contraria marcando 9 goles. Etxeberria hasta le designó como lanzador de penaltis para mejorar en esa faceta.

En el mes de diciembre del año pasado formó parte de la convocatoria del primer equipo ante el Villarreal con Garitano, pero no debutó hasta el tramo final de la temporada de la mano de Marcelino. A Nico Serrano le costó algo más asentarse en el filial, aunque dejó goles de bella factura.

Pretemporada con Marcelino

Nico Williams y Serrano en el inicio de los entrenamientos de pretemporada en Lezama junto a Artola, Prados y Julen Agirrezabala con Petxarroman al fondo. (Aritz LOIOLA / FOKU)

Marcelino reclutó este verano a cinco cachorros para realizar la pretemporada con el primer equipo: el portero Julen Agirrezabala, el centrocampista Beñat Prados y los atacantes Artola, Nico Williams y Serrano. Agirrezabala y Nico Williams convencieron al técnico asturiano y debutaron en la primera jornada del campeonato en Elche al igual que Vivian, que regresaba al Athletic tras jugar cedido en el Mirandés.

En cambio, Serrano debutó en la cuarta jornada de Liga ante el Mallorca y en la primera vuelta ha jugado también con el Bilbao Athletic, marcando 3 goles en 14 partidos.

En el primer equipo rojiblanco lleva 10 encuentros y tan solo ha sido titular en los disputados en Copa ante el Atlético Mancha Real y en el de la última jornada ante el Rayo. Serrano cubrió la ausencia de Muniain en el costado izquierdo del ataque y se destapó con un precioso tanto con la izquierda que sirvió para ganar en Vallecas. Todavía tiene 18 años y, a pesar de que se percibe que tiene una tremenda calidad técnica como demostró en el golpeo del tanto, le falta curtirse algo más en la élite.

A Nico Williams también le ha costado ser eficiente en sus apariciones ofensivas, pero desde el primer minuto se ha ganado al público y al cuerpo técnico ilusionando con la velocidad y verticalidad que imprime al juego del equipo junto a su hermano Iñaki. Es el único jugador que ha participado en todos los encuentros. Se estrenó con un doblete en Copa en el apartado goleador y fue el autor del gol que metió al Athletic en la final de la Supercopa.

En la eliminatoria ante el Barcelona celebró que ya forma parte de la plantilla del primer equipo y su cláusula ha ascendido hasta los 50 millones. Tiene contrato hasta 2024 y cumpirá 20 años en julio.

Los goles anotados en este último mes han servido a los Nicos como carta de presentación para el gran público. Representan la esperanza del Athletic para un futuro inmediato que ya está aquí. Junto con Oihan Sancet, Unai Vencedor, Oier Zarraga, Vivian o los porteros Agirrezabala y Unai Simón -es nacido en 1997, aunque parezca ya un veterano- todo apunta a que conformarán la próxima columna vertebral del equipo. Y seguro que, más pronto que tarde se van sumando los laterales Álvaro Núñez e Imanol -cedido en el Mirandés-, junto con el centrocampista Beñat Prados o Artola, que debutó en la eliminatoria de Copa.

Falta encontrar un delantero centro que se asiente en el equipo. Es la posición más complicada al tener que jugar muchas veces de espaldas y en desventaja con los defensas. Ewan Urain, internacional con Escocia sub 21, se ha quedado estancado en las últimas campañas en el Bilbao Athletic por las lesiones. Nacido en 2000, va a cumplir 22 años en marzo. En el primer equipo está también Asier Villalibre, otro gran rematador y que todavía tiene 24 años. Las lesiones musculares le han impedido dar un paso al frente esta temporada, pero ya ha dejado muestra de su capacidad goleadora marcando en la final en la que conquistaron la Supercopa la campaña anterior.

Nico Serrano y Nico Williams saludan al público al finalizar el derbi disputado en Mendizorrotza este mes de enero. (@AthleticClub)